
Para penas las ajenas y todo eso. Yo no me llamo Javier. Y para colmo todos mis amigos jodiendo...Edgar, te ves mal, tienes que hacer algo. Nos caías mejor cuando eras un borracho insoportable e irresponsable.
No los culpo, por lo menos era gracioso. Sin decisión, sin futuro. No tengo otra elección, balance en mi vida; estruendoso fracaso.
Ni modo. Creo que mejor me voy a ir a comprar unas cervezas, más de diez seguro. A ver si como alcohólico resulto más creíble que como escritor. Después de todo, como decía Ricardo Flores Magón: El abismo no nos asusta, es más bella el agua despeñándose.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home